
Entre los estudios importantes de fertilidad por los que debe pasar un hombre para un tratamiento de reproducción asistida, se encuentran los análisis del semen o seminograma. De esta manera, se pueden conocer parámetros como: la concentración, la movilidad y la morfología de los espermatozoides.
La muestra de semen es posible estudiarla, gracias a que se le pide al hombre una muestra obtenida a través de la masturbación, cumpliendo con un periodo de abstinencia de entre 3 y 5 días.
Dependiendo del caso de la pareja será recomendado hacer un estudio de fertilidad a profundidad. Estudiando en el laboratorio la muestra de semen para tests como: el FISH, la fragmentación o el Fertile chip.
FISH
El nombre FISH viene del inglés: Fluorescence in situ hybridization. Esto quiere decir: Hibridación in situ fluorescente. Es una técnica de estudio del semen que permite conocer cuántas copias de cromosoma hay por espermatozoide y así calcular un porcentaje de alteración genética.
Es decir, esta técnica permite conocer si los espermatozoides tienen 23 copias de cromosomas como deberían o si existe alguna alteración. A partir de aquí, se puede dar un diagnóstico y se puede elegir el camino correcto para la pareja que realiza el tratamiento reproductivo.
En caso de existir una alteración cromosómica en los espermatozoides, se recomienda hacer otros estudios como el Diagnóstico Genético Preimplantacional o DGP. De esta manera se pueden biopsiar los embriones y elegir el más apto genéticamente para transferir.
Está indicado, sobre todo, cuando la pareja ha pasado por: varios fallos de implantación, cuando se implanta el embrión y luego hay abortos, en caso de oligozoospermia o teratozoospermia severa.

Fragmentación
El estudio de fragmentación es una prueba que permite analizar el esperma para poder diagnosticar qué porcentaje de DNA espermático fragmentado existe. De esta manera, se puede hacer un diagnóstico más completo de la fertilidad del hombre para aumentar las probabilidades de embarazo y parto de la mujer.
Estas roturas, o fragmentaciones del DNA, se estudian en la cabeza del espermatozoide y, en muchas ocasiones, está directamente ligado a fallos de implantación, infertilidad y abortos. En caso de que este test salga alterado, es recomendable realizar un Fertile chip.
Fertile chip
Este es un estudio recomendado para minimizar el material biológico fragmentado y así poder recuperar los espermatozoides “sanos” para poder crear embriones de calidad.
Este sistema de dos cámaras permite seleccionar la muestra seminal de manera que aquellos espermatozoides con mejor pronóstico migrarán desde una cámara a otra y así dejar de lado la muestra seminal con alteración del ADN.
Preguntas frecuentes
- ¿Cuándo son indicados estos estudios? Estos estudios son indicados, sobre todo, para hombres mayores de 45 años, sufrir de varicocele y en casos donde se haya observado baja calidad embrionaria, fallos de implantación y/o abortos de repetición.
- ¿Por qué son recomendados estos estudios? Son recomendados para poder determinar la causa de estos fallos y para mejorar el porcentaje de embarazo.